Apertura f/14Tiempo de exposición 1/125 s
Velocidad ISO – 200
Distancia focal 105 mm
La aparente inapetencia para el amor de ciertos jóvenes es causada por una mariposa hecha de polvo luminiscente de estrellas, que en su fiebre apasionada por existir confunde la ansiedad de algunos labios con las clamorosas señales de las flores. Este imaginal lepidóptero se alimenta de la energía de amar de sus víctimas, de las que es muy celoso y a las que acaba por devorarles el corazón.
Rafael Pérez Estrada, Delecta celosa.
maravilloso. no tengo más palabras, sólo sonrisa.
ResponderEliminarabrazos, querido Antiqva*
precioso ..me ha parecido mi hermano que vuela en chismes de esos jaja
ResponderEliminares una pasada...
besos y sonrisas...cielo
Lamentablemente hay algunas personas que más que mariposas son vampiros....
ResponderEliminarBesos
PD- El parapente: ¡qué deporte de alto riesgo!. He visto a unos cuántos "Expertos", (no creas que eran novatos) en el Sur de Argentina -al cambiar el viento inesperadamente- hacerse torta contra las montañas.
Me dan miedo las mariposas y más si se comen el corazón.
ResponderEliminarInquietud.
Un abrazo.
Una bella foto, los jovenes que encantan a las niñas con sus vaqueros tan abajo y esas gorras tan raidas, seguro que el artefacto que mencionas ya dio buena cuenta de ellos,.....por que de amor,... amor verdadero; no lo conocen....
ResponderEliminarMantis religiosa, o voladora mariposa nocturna, amor que deriva en ejecución de lo deseado no es tal cosa.
ResponderEliminarLa foto insinua el texto fascina.
En fin.. amigo.. me voy a volar contigo en ese deporte de riesgo que es vivir la vida de la mejor manera posible.. con amor y felicidad..
ResponderEliminarUN besazo
Buena toma y buen encuadre. Me gusta.
ResponderEliminarSiempre será mejor vivir la vida con amor y ética... eso es deporte de riesgo.
Un saludo
Mejor vivir el amor a plenitud y mantenernos alejados de esa mariposa que mencionas..
ResponderEliminarBuen inicio de semana amigo ANTIQVA
Besos.
Mi querido amigo,una fotografía espectacular!,el texto que seleccionaste delicioso...pobres quebrantados corazones.
ResponderEliminarUn beso.
¿Te dije alguna vez que no me gustan las mariposas?... ¿y que "no soporto" tener los pies levantados del suelo?
ResponderEliminarcreo que el lepidóptero de la narración conmigo ha dado en hueso ;)
muy buena la imagen, sí señor :)
un abrazo
Oh wow...
ResponderEliminarLepidoptérico misterio...
Estaré vigilante de mi jardín.. No se le ocurra a uno de esos especímenes visitarme.. Y robarme el alma.
besotes!!
Qué bichitos más raros..., hasta parecen humanos, por su costumbre.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy buena la fotografía y un texto muy bonito.
ResponderEliminarUn saludo.
¡¡Menuda fotografía!! No te pregunto dónde estabas tú para poder sacarla...
ResponderEliminarAh, decirte que menos mal que por aquí la mariposa "esa" jamás pasó.
Besitos.
Una bella foto y un sonrisa .
ResponderEliminarMe gusta la analogía del texto y la foto, me querido amigo un gusto leerte y ver tus fotografías nuevamente, un gran abrazo
Vuelvo y no quiero ir otra vez ;)
Pero es aparente, luego no es, o solo se escapa.
ResponderEliminarCanibalismo, puede ser, a veces simbiosis, como los líquenes.
La foto me deja en mitad del cielo.
Me gustó todo, amigo Antiqva
Abrazo grande para ti
Ío