Páginas

jueves, 20 de septiembre de 2012

Un rayo de luz (Cuento fantástico)

Apertura f/16
Tiempo de exposición 1/40 s
Velocidad ISO – 200
Distancia focal 25 mm
Compensación de la exposición -1,00
HDR
.
Como todos los días, terminado su trabajo, llegó a casa a las veinte horas y cinco minutos. Abrió la puerta y pasó al recibidor. “Buenas noches, cariño –dijo, sin esperar que nadie le contestara”. Caminó hacia el salón y rutinariamente dejó sobre la bandeja plateada sus llaves, la cartera, el teléfono móvil, el reloj y el pañuelo, este siempre como nuevo, inmaculadamente doblado. Con cierta desgana se quitó la gabardina y la colgó de una percha. Luego, fue caminando por el pasillo, dando golpecitos en los pulsadores de la luz, hasta que llegó al cuarto de baño, en donde se lavó las manos impregnándolas de jabón de aloe vera. Fue en ese instante cuando notó cierto estremecimiento. En ese momento, escuchó que su esposa lo llamaba.

Se secó las manos en una toalla de color azul claro y suave textura y emprendió el camino de regreso al salón, apagando cada uno de los pulsadores que antes había ido encendiendo. Cuando llegó, vio que su esposa no estaba allí. Se acercó a la cocina, tampoco estaba. Finalmente la encontró en la salita, frente al inmenso televisor de plasma que en ese momento ya la tenía absorbida. “Cariño –dijo-, me decías algo…” La mujer no le respondió. Pudo escuchar que mascullaba algo, pero comprendió que ahora, absorta en la contemplación de su programa preferido de la noche, ella estaba en otros mundos.

Fue entonces cuando el hombre reparó en el estremecimiento que había sacudido su espalda cuando se estaba lavando las manos unos minutos antes. Recordó que cuando eso sucedía había podido materializar, más allá del espejo, a una mujer que lo estaba contemplando y que desde la noche le hablaba. Al escuchar sus palabras, había sentido durante unos instantes, mientras la miraba con asombro, que la vida todavía seguía latiendo en sus venas. Había sido en ese momento cuando su esposa lo había llamado, destrozando esos segundos de hechizo.

El hombre pensó que debía volver al cuarto de baño. “Es posible –pensó- que la mujer todavía esté allí”. Iba caminando nuevamente por el pasillo cuando escuchó que su esposa, de nuevo, le decía algo. Estuvo a punto de volverse, pero no lo hizo. Había decidido seguir adelante con la aventura que le estaba aguardando más allá del espejo. Sabía que en la voz de la noche, que esa mujer representaba, podría escuchar todas las voces que callan durante el día.


20 comentarios:

  1. Bellissima questa foto ... mi ha risvegliato la nostalgia del mio amato mare.
    Complimenti
    Cri

    ResponderEliminar
  2. Me gustó eso de traspasar el espejo, a una dimensión paralela. Bueno, eso es lo que me imagino...

    El relato da para seguirlo.

    Besos

    ResponderEliminar
  3. Estoy de acuerdo con Myriam, continuará, si?

    Tus fotos, las dos, fantásticas!!
    Ese juego de luces les da una magia increíble, como salidas de un cuento.

    Bessets amic!

    ResponderEliminar
  4. Ese meticuloso, fino estilista, puntillista, se olvida a la mujer en la sala, tal vez en el espejo no encuentre nada, ni su pañuelo doblado ni su doble ni una mujer soñada.

    Me enamoran tus cuentos cortos, tienen muuucha inquina y mágia.

    En esa silla estaría para siempre, pero a esa hora.
    Besito.

    ResponderEliminar
  5. Solo para decir que el cuento está terminado... Al menos así nació.

    Otra cosa es que cualquier dia, uno, que es inconstante, decida publicar una segunda parte, pero eso sería ya, realmente, otra historia...

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  6. Como Alicia :D

    espero que le aguarden tras el espejo más de mil maravillas.

    ResponderEliminar
  7. Hermoso rayo de luz y fantástico cuento; que yo creo que continua, al otro lado del espejo y eso, eso... es otra historia. Saludos

    ResponderEliminar
  8. Maravilloso, genial y de gran estilo. Me encantó. Un abrazo

    ResponderEliminar
  9. A mi el espejo, siempre me manda a la mierda... La foto estupenda como siempre.


    Saludos y un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. Qué intriga al final, es precioso. Y que preciosa la foto.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. También me ha gustado este cuento para una segunda parte.. La foto es bellísima...me ha encantado.

    Besitos.

    ResponderEliminar
  12. La mujer del espejo es el misterio que ataca la rutina cotidiana de este hombre.
    Sí, que vuelva al baño solo y que se lance a la aventura con ella.

    Un abrazo, amigo.

    ResponderEliminar
  13. Que cosa mas extraña Antiqva, mira la imaginacion que tienes, me pregunto si la mujer del espejo era la esposa que queria comunicarse con el marido, de alguna forma,...o tal ves era alguien del mas alla,...bueno pienso que nos quedaremos con la intriga jejjeje

    ResponderEliminar
  14. Uyyy, qué misterio. Espero saber qué pasó después... ¿Dices que el cuento ya está terminado? Qué bueno.

    La fotografía es preciosa, como todas las que haces. Me encanta esa luz y ese mar tan tranquilo.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  15. Me encantan estas historias de misterios y dimensiones. La verdad que yo también sentí el escalofrió de vuelta al espejo… ay qué miedo.
    La fotografía es bellísima.

    Besitos.

    ResponderEliminar
  16. Querido Amigo, esa foto en el header es…¡mágica! La luz sobre los niños le da una atmósfera de cuento de hadas, una verdadera preciosura!

    Luego, otro “rayo de luz” en tus letras, nos lleva a ese espejo en el cuarto de baño, un cuento para grandes, un exquisito misterio.
    ¡Muchas Gracias! Un cariñoso abrazo para Vos.

    ResponderEliminar
  17. se me habia pasado esta entrada
    pero que tonta soy!!

    te importa si invito a un amigo que tambien escribe cuentos a que lea el tuyo..?
    le encantara..seguro

    un abrazo enorme, amigo mio

    ResponderEliminar
  18. Enigmático texto querido,la fotografía mágica.Prestando atención se escucha ,es una perturbadora voz que quizá llene también mucho silencios del día.

    ResponderEliminar
  19. Hola Idelfonso, acabo de descubrir tu faceta literaria y tengo que felicitarte porque junto con unas magníficas imágenes colocas un excelente relato. Magnífico trabajo, amigo. Saludos, manolo.

    ResponderEliminar
  20. Los silencios son la llave que nos abren otras puertas... :)
    Un placer volver a leerlo, mi amigo... no me olvidé, estoy con mucho trabajo... quiero vacaciones yaaaa....!!!
    Un beso grande
    Sigo leyendo antes de que se termine el día... ;)

    ResponderEliminar

Gracias, siempre, por tus palabras...

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.