Imagen: Antiqva
Jano, un gato blanco que nos ha salido más listo que el hambre, hijo de la gata Natacha, está pasando estos días por unos momentos duros…
Parece que la otra noche, cuando intentaba conquistar el corazón de una gatita vecina, ella –algo impertinente- le habría dicho: “Oye tú, chico, como es que tienes un ojo verde y otro azul… ¿Qué pasa contigo…? ¿Es que tuviste dos padres…?”
Y claro, así está ahora Jano de lánguido…
¡Ay, las mujeres…!
.
Jano, un gato blanco que nos ha salido más listo que el hambre, hijo de la gata Natacha, está pasando estos días por unos momentos duros…
Parece que la otra noche, cuando intentaba conquistar el corazón de una gatita vecina, ella –algo impertinente- le habría dicho: “Oye tú, chico, como es que tienes un ojo verde y otro azul… ¿Qué pasa contigo…? ¿Es que tuviste dos padres…?”
Y claro, así está ahora Jano de lánguido…
¡Ay, las mujeres…!
.
Pero, q carita tan preciosa, por favor!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarSe me cae la baba con estos bichos, no lo puedo evitar.
Besicos.
Es verdad es un gatito bonito, y tambien es verdad que tiene un ojo verde y otro celeste, eso es comun en los gatos, y tambien en los perros, magnifica foto amigo, ¿sensible el gatito hee?
ResponderEliminarjaja..., Antiqva,
ResponderEliminarqué modo de contar tan fantástico.
PRecioso el gatito.
Un abrazo.
Jano, contesta de mi parte a esa gatita, que padre, sólo hay uno - como madre-. ;-)
ResponderEliminarPrecioso
Un abrazo amigo cuentista.
Ya sabes que me tienes "ganada" con estas fotos.... ¡Qué guapooooo! me encanta. Digno hijo de su blanca y hermosa mami...
ResponderEliminarPobre... si que parece melancólico, si...pero no te fíes mucho, tal vez quería magdalenas con colacao...
Las mías hacen unas caídas de ojos... que ya, ya...
Un beso, cielo.
Natacha.
Sí que parece triste el gato lunar...
ResponderEliminarPero que no se nos apure,que a lo mejor es que la gata necesita su tiempo,oyes,jajaja
Es realmente precioso, seguro que tendrá más conquistas.
Eso es lo que tiene ser sensible.
Besos.
Pues que no se apene, que eñ tener un ojo verde y otro azul es un don e incita mucho, lo que pasa es que esa gata se ve que no entiende mucho de estas cosas.
ResponderEliminarYo tenía una perra blanca con un ojo verde y otro azul, y vamos, causaba furor entre los perros del barrio.
Un abrazo
¡Ay mi Janito! no permitas que se nos amohíne por tan poca cosa. El tener un ojo de cada color no es un defecto, sino una auténtica originalidad. Besitos a tí y a él.
ResponderEliminarAyy con esas mujeres con sus comentarios nada atinados, ja!
ResponderEliminarLa foto está chévere.
Abrazos.
Pues una gata que se fija en los colores de los ojos en lugar de considerar la travesía de su admirador, no merece todos esos suspiros, cuya huella se ve claramente en la foto ;)
ResponderEliminarbesos, amigo!!