“Siete astros errantes circulan por los caminos del Olimpo y con ellos se hila la eternidad. La Luna que brilla por la noche, el lúgubre Cronos (Saturno), el dulce Sol, la Venus de Pafos, protectora del himen, el valiente Aries (Marte), el fecundo Hermes (Mercurio), y Zeus (Júpiter), principio del nacimiento, fuente de la naturaleza.
Estos mismos ha recibido en dote la raza humana, y en nosotros están la Luna, Zeus, Aries, Afrodita, Cronos, el Sol y Hermes. Así extraemos nosotros del fluido etéreo las lágrimas, la risa, la cólera, la palabra, la generación, el sueño y el deseo.
Las lágrimas son Cronos, Zeus la generación, Hermes la palabra, Aries el valor, la Luna el sueño, Venus Citerea el deseo, y el Sol la risa, pues él regocija al pensamiento humano y al mundo infinito.”
Estobeo (Eglogas físicas; VI, 14)
NOTAS
-En la antigüedad clásica solamente se conocían cinco planetas (Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno), que junto con el Sol y la Luna eran los siete astros que formaban el Cielo Inferior.
-En el Cielo Superior, en el Octavo Cielo, era donde tenía su residencia, para los iniciados en los misterios, el Dios Creador.
-Estas ideas fueron recogidas por los hombres del Medievo, de modo que en ellas se encuentra el fundamento de que los posteriores edificios sagrados de planta octogonal, tanto en el Islam como en el Cristianismo, no sean sino representaciones simbólicas del cosmos y del proceso ascensional del hombre, que debe culminar –cuando alcanza el Octavo Cielo- con su visión del Creador.
Se pensaba que a través del octógono el hombre pasaba del cuadrado (la Tierra) al círculo (el Cielo) y atravesando las siete escalas planetarias arribaba al Cielo Superior, destino final de ese proceso de ascensión hierática hacia el Supremo.
-En el Cielo Superior, en el Octavo Cielo, era donde tenía su residencia, para los iniciados en los misterios, el Dios Creador.
-Estas ideas fueron recogidas por los hombres del Medievo, de modo que en ellas se encuentra el fundamento de que los posteriores edificios sagrados de planta octogonal, tanto en el Islam como en el Cristianismo, no sean sino representaciones simbólicas del cosmos y del proceso ascensional del hombre, que debe culminar –cuando alcanza el Octavo Cielo- con su visión del Creador.
Se pensaba que a través del octógono el hombre pasaba del cuadrado (la Tierra) al círculo (el Cielo) y atravesando las siete escalas planetarias arribaba al Cielo Superior, destino final de ese proceso de ascensión hierática hacia el Supremo.
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Hola querido amigo, perdona, no te abandoné, es que este mes es de lo peor!! jajaja
ResponderEliminarSiempre me llamaron niña de luna, por eso de encantarme la luna, noche y dormir poco!! y el sol por lo que tu dices, parece que te hace sacar siempre la sonrisa... así que sin duda me quedo con la luna y el sol...
Muchos besos amigos.
Me encantaba la astronomia de jovencita, hasta pertenecia a un grupo en la universidad para hacer salida.....Ahora todo quedo atras..... Siempre me gusto la luna, no he cansado de mirarla, debe ser que en ella estan mis sueños nos cumplidos y sigo esperando que me lo entregue....
ResponderEliminarSaludos
Antiqva querido, yo leo estos pasajes mezcla de astronomía y mitología y me envuelve una nube de recuerdos...
ResponderEliminarSolía perderme en la lectura de los dioses griegos y latinos en épocas de mi juventud, y aunque no todas las historias hayan sido felices, mi parte fantasiosa ha viajado con ellos.
Vos lo lograste por un momento también, llevándome a intentar desde mi humilde lugarcito llegar a ese Octavo Cielo...
Un abrazo! (y gracias por aceptar mi mate con amigos, para vos endulzado con miel!)
“Siete astros errantes circulan por los caminos del Olimpo y con ellos se hila la eternidad."
ResponderEliminarE Inuit empieza a volar con estas líneas.
En astrología a estos astros se le dan otros atributos.
Sol = La vida social. La profesión
Luna = La vida emocional e intuitiva.
Venus= La forma de expresar el amor.
Marte = La energía y la actividad.
Júpiter= La gracia, saber hacer.
Saturno= El rigor,lo que cuesta.
Mercurio= La manera de expresar las ideas.
Es un placer aprender de usted.
Inuits
Y yo por llevar contraría como es mi costumbre, diría, siete son los sentimientos que embargan al hombre, las lágrimas, la risa, la cólera, la palabra, la generación, el sueño y el deseo, y esas siete manifestaciones de su yo han creado a los dioses.
ResponderEliminarPor otra parte, una explicación preciosa por parte de Estobeo de porque somos asi.
UN saludo
Alcanzar el octavo cielo debe ser magnificente.Algo poderoso que sobrecogerá... sobre todo a las personas lunáticas, a esas en las que el influjo de la luna las llena de misterios y ensoñaciones...
ResponderEliminarY soy de la creencia que todos los dioses nos habitan a cada uno de nosotros, pero sólo hacen acto de presencia cuando creen conveniente...Por algo son dioses...
Besos.
entre místico y científico se van enlazando astros que según lo que estudiemos, tienen diferentes significados.
ResponderEliminarEl Sol: representante de nuestro ego.
La Luna: representante de nuestra psiquis.
Saturno: el viejo sabio que traba todo lo que quieras hacer.
Venus: representante del amor y la belleza.
Dioses, planetas, astros que tejen y pintan no sólo el cosmos, sino a veces también nuestro destino.
Besos, querido amigo.
De algo sí no hay duda y es de la ley hermética de la correspondencia: como es arriba es abajo, como es el macrocosmos es el microcosmos...
ResponderEliminar¿O no amigo? ;)
¿Crees tú que algún día podamos dar un paseito por la octava esfera? jeje..
Un abrazo amigo...
Qué voy a decirte... si vivo en la luna, querido amigo.
ResponderEliminarPerdona mis ausencias... llegará enero y no con su cuesta, sino con mi regreso...
Un beso mi cielo.
Natacha.
Muy interesante la influencia de cada astro.
ResponderEliminarYa que se menciona el siete;
Siete son los pecados capitales.
Siete los sacramentos,
Siete los días de la semana...
Un abrazo
No soy muy afín de la mitología pero sí mucho de la astrología, y no por lo de mágico o místico, sino por los misterios que encierra a nuestros ojos.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo ignoro mucho de este tema, pero para eso está usted, para que me ilustre.
ResponderEliminarBien.
Abrazotes.