Imagen: Antiqva
Ella le había pedido al Dios de la Lluvia que las aguas, aquel otoño, se llevaran sus lágrimas.
Él había pensado que si conseguía hablar con ella en sueños quizás pudiera recuperarla.
Mientras tanto, los murmullos que emitían sus almas encontraban su reflejo en los ruidos nocturnos que producían los insectos.
Ella le había pedido al Dios de la Lluvia que las aguas, aquel otoño, se llevaran sus lágrimas.
Él había pensado que si conseguía hablar con ella en sueños quizás pudiera recuperarla.
Mientras tanto, los murmullos que emitían sus almas encontraban su reflejo en los ruidos nocturnos que producían los insectos.
.
Bueno pues si las lágrimas de ella son por la misma causa que las de el, deberían de encontrarse de nuevo!!
ResponderEliminarMe encanta de nuevo sentiros tan cerquita!! muchos besitos para mi hermosa pareja!!
No es casualidad que leer tus palabras me re-suenen, encontrando un segundo significado... el miedo ancestral al otoño, los sueños, los insectos libando para regalar miel...
ResponderEliminarTampoco es casual encontrar fotos de la infancia entre tus imágenes, como época dorada, como la mía lo fue también.
Un abrazo.
Qué hermoso Antiqva!!
ResponderEliminarQuizás los murmullos se transformen en una canción que los 2 puedan escuchar para volver a encontrarse.
Un beso.
pues resulta que las almas que se añoran se las arregla para compartir un instante íntimo aunque estés lejos.. y para eso se sirven del cosmos que se conmueve con tanto amor y roba un segundo de la eternidad para ellas... para sus 'desencuentros'..
ResponderEliminarhoy me has hecho suspirar mucho amigo.. el alma siempre añora algo...
besos miles!!!
Las almas siempre se encuentran; ya que resuenan en un mismo corazon....
ResponderEliminarBesos Antiqva y lindo Domingo
Janeth
Me ha encantado, esta comparación(?) de las almas con los insectos, de sus ruidos...
ResponderEliminarUn abrazo.
Desencuentro = ruptura = rotos ...
ResponderEliminarUfff, muy fuerte!
La foto: GENIAL!!!
Un abrazo
Conchi
Los desencuentros tienen algo bueno... siempre se puede hacer algo por acabar con ellos y el camino y el resultado, suele ser placentero y hermoso.
ResponderEliminarUn beso, cielo.
Natacha.
A mí lo más impresión que me ha dado es imaginar el daño que se haría el gato cuando entró en ese botellón. ¡Pobrecito!. Eso sí sería un desencuentro...
ResponderEliminarUn saludo Amigo!
será un hermoso encuentro de almas, algún día, en algún lugar.
ResponderEliminarmuy bello!!!
abrazos
Tal vez los grillos de mi casa sean amantes del pasado...
ResponderEliminarlos escucharé con más atención ;)