Paseando por las ruinas de Cartago, en la costa tunecina, la señorita C., al contemplar el color del cielo y del mar, tuvo la certeza de que las gamas de los azules habían sido inventadas allí...
Ga mas de azules exquisitos, mar y cielo, y esa columna dórica, en los baños de Antonino, donde se besan pasado y paisaje de ensueño. La señorita C me va resultando una incógnita muy especial. Besitos !salve!
Las ruinas de Cartago por fuego...y, ese azul, qué contraste;qué certeza de ambición tuvo el romano para odiarla tanto y destruirla con el mismo cielo, con sus mismas manos.
Por cierto, que no me ajusticiaron, es que me gusta jugar y a veces ver la vida desde otro ángulo. ¿Quien dice que así se ve la vida del revés y no del derecho???. Pues eso, besos.
Estoy de acuerdo con la Señorita C. Esos azules no sólo atrapan nuestra vista con sus muchos matices, también se adueñan de nuestro ánimo, nos elevan hacia ellos, nos regalan Paz.
No me extraña que pensara eso, es una auténtica maravilla, dan ganas de perderse en el cielo.
ResponderEliminarBesos y feliz fin de semana Antiqva.
Ga mas de azules exquisitos, mar y cielo, y esa columna dórica, en los baños de Antonino, donde se besan pasado y paisaje de ensueño.
ResponderEliminarLa señorita C me va resultando una incógnita muy especial.
Besitos !salve!
Por fin la señorita C. abandona la tristeza y se deja abrazar por cielos y mares y todos los azules, hasta los inimaginables.
ResponderEliminaruna sonrisa
Y debe ser cierto lo que pensó la señorita C., porque esos azules son maravillosos!
ResponderEliminarExcelente fotografía!
Un beso
Normal cualquiera se pierde en esos azules con tanta fuerza y a la vez suavidad.
ResponderEliminarBesos y buen finde.
¡No me extraña! porque vaya un color más azulado y bonito que tiene el cielo en tu imagen.
ResponderEliminarUn beso.
Esos azules vio la reina Dido, se sintió fascinada y decidió quedarse allí. Besos, querido amigo. Una foto preciosa.
ResponderEliminarPor las ruinas de Cartago.. que sugerente.....
ResponderEliminarvaya con la Srta. C, se pasea por sitios bien bonitos.. algo le pasa.... ...
Besitos
Las ruinas de Cartago por fuego...y, ese azul, qué contraste;qué certeza de ambición tuvo el romano para odiarla tanto y destruirla con el mismo cielo, con sus mismas manos.
ResponderEliminarhttp://enfugayremolino.blogspot.com/2011/03/japon-en-silencio.html
Los azules, los azules, me pueden los azules. Me pueden los cielos y los mares. Uao!!
ResponderEliminarBesos.
Por cierto, que no me ajusticiaron, es que me gusta jugar y a veces ver la vida desde otro ángulo. ¿Quien dice que así se ve la vida del revés y no del derecho???.
ResponderEliminarPues eso, besos.
Que digan después que el Azul es frío.
ResponderEliminarMaravillosa fotografía.
Estoy de acuerdo con la Señorita C. Esos azules no sólo atrapan nuestra vista con sus muchos matices, también se adueñan de nuestro ánimo, nos elevan hacia ellos, nos regalan Paz.
ResponderEliminarQué fotoooo mi Amigo! Preciosa!
Besos azules y un gran fin de semana para Vos!
No tiene mal gusto la señorita C. y tú un gusto exquisito eligiendo lugares para fotografiar :)
ResponderEliminarabrazo y buen finde
Y no lo dudes, porque se ven hermosos esos colores :)
ResponderEliminarSeguramente la señorita C. estaba en lo cierto... :)
ResponderEliminarLa fotografía preciosa,el texto delicioso,poesía para hacernos llegar y visualizar esos azules únicos.
ResponderEliminarBesos.
Confieso que sentiría lo mismo, pasearía y me perdería definitivamente en ese azul cielo encadilador.
ResponderEliminarSaludos.