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La historia de Tiedra, antiguo señorío de la familia Alburquerque y Osuna, y con ella la de su castillo en lo alto del cerro, se remonta al siglo XIII, en tiempos de don Tello Téllez de Meneses. La fortaleza presenta un pequeño e irregular recinto amurallado con la torre del Homenaje en el centro.Además de su castillo, Tiedra atesora otros edificios de gran valor arquitectónico, como la iglesia de San Pedro, de estilo mudéjar con reformas del siglo XVII, y la del Salvador, de estilo gótico.
Tiedra celebra en febrero, con especial devoción, la festividad de Santa Águeda. Es algo digno de ver la entrega con que las mujeres de la cofradía bailan y celebran esta fiesta año tras año, todas vestidas de negro, con el traje de lentejuelas de “viuda rica”.
El 20 de agosto se celebra la fiesta del Ofrecimiento, en la que se ofrecen a la Virgen unas corderas que han sido previamente subastadas.
La ermita de la Virgen de Tiedra, de estilo barroco, se encuentra a las afueras de la población.
José Cruz Rodríguez (Visita Valladolid)
La ciudad donde vivo es Morelia, anteriormente llamada "Nueva Valladolid". Las tradiciones que relata se parecen un poco a las de aca. Hermosa fotografía.
ResponderEliminarSaludos y gracias!
Me he paseado ya por todo el blog, ¿cómo es que la gente comenta tan poco? Textos interesantes, poemas hermosos, fotos sublimes..
ResponderEliminaren fin cosas que no entiendo!
Felicidades (y perdón por expresarme aquí)
Seguiré viniendo.
Estimada amiga en la distancia
ResponderEliminarEn relacion con tus palabras, comentarte que TIEDRA es precisamente un pueblo castellano que esta a unos 20 minutos por buena carretera de la Valladolid española.
Conozco bien Valladolid ya que visito la ciudad al menos una vez al año.
Con respecto a Tiedra es un pueblecito de pequeñisima dimensión, que sin embargo tiene un castillo, una ermita y algun otro monumento mas que son de especial interes por su "sencillez y candor".
No es raro que alguna costumbre castellana o vallisoletana se pueda hoy rastrear en Morelia, ciudad de la que he oido hablar pero que desconocía que antes hubiera sido la Nueva Valladolid.
En fin, ha sido una satisfaccion poder cambiar unas palabras.