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miércoles, 12 de noviembre de 2008

LIBRO PARA SALIR A LA LUZ DEL DÍA





El “Libro de los Muertos” de los antiguos egipcios contiene diversas fórmulas mágicas cuya finalidad, curiosamente, no es ayudar a los espíritus de las personas fallecidas sino que se pretende que sean conocidas y practicadas por hombres que todavía viven y que previamente han sido iniciados en los misterios de la vida y la muerte.

Los antiguos egipcios entendían la muerte como un proceso de liberación en el que el espíritu, abandonando la materia, pasaba por una glorificación que culminaba con su llegada a la Luz y su transformación en akh (espíritu luminoso o ser de Luz asimilado al gran dios primordial).

El “Libro de los Muertos” es el nombre que damos nosotros a un conjunto de rituales y conjuros que los egipcios denominaban como “Libro para salir a la Luz del día”. Con la ayuda de los textos mágicos que lo integran, el espíritu del fallecido veía facilitado su tránsito al más allá, ya que antes de alcanzar la glorificación debía superar diversas pruebas para lo que resultaba especialmente valiosa la ayuda de la magia del libro.

El “Libro de los Muertos” era un manual que, en principio, solamente habría de ser leído por el fallecido, en su tránsito al Reino de Osiris, así como por el Sacerdote Lector (Jery-Hebet), instruido previamente en la Casa de la Vida, con ocasión de los rituales que habrían de celebrarse en la tumba del difunto. Los conjuros que se integran en el libro, dotados de unos intensos poderes mágicos, formaban parte de un conocimiento secreto e iniciático al que los profanos no podían tener acceso.

Ese carácter iniciático del conocimiento sagrado que envuelve al “Libro de los Muertos” y, en general, a los textos religiosos y funerarios egipcios, hace que en nuestro tiempo su contenido se nos presente como contradictorio y carente de sentido. El hombre moderno ha perdido el vinculo con lo trascendente y las inscripciones mágicas que emanan de la espiritualidad egipcia se nos muestran tremendamente alejadas en el tiempo, careciendo por nuestra parte de las claves que permitirían comprender su significado liberador del espíritu del hombre dominado hasta su muerte por los sentidos materiales.


Misterios egipcios
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De entre los misterios egipcios sobresalen, posiblemente por el conocimiento que de ellos tuvieron los filósofos griegos que viajaron a Egipto, los relacionados con el mito de la muerte de Osiris y su resurrección mágica gracias a los poderes de su esposa Isis.

Los misterios de la muerte y la resurrección de Osiris constituían unas enseñanzas iniciáticas que se desarrollaban en las Casas de la Vida. Eran recibidas, envueltas en el sigilo y el secreto, por grupos de adeptos que después de haber probado que eran merecedores de ello por sus cualidades morales y personales eran instruidos en esos legendarios conocimientos que nos hablaban de la vida después de la muerte. El origen de los antiquísimos cultos mistéricos egipcios se remonta a unos tiempos en que estos hombres, todavía, ni siquiera habían llegado a conocer la escritura. De acuerdo con estas enseñanzas iniciáticas, del mismo modo que Osiris, tras su pasión y muerte, fue resucitado y glorificado por la magia de Isis, también los iniciados en los misterios tenían la esperanza de que el hombre, cuando le llegase la muerte, habría de renacer de nuevo y transfigurarse en Dios.

Los conjuros, ritos y creencias que se plasman en el “Libro de los Muertos”, que en buena parte recopilan anteriores escritos procedentes de los ”Textos de las Pirámides” y de los “Textos de los Sarcófagos”, no pretenden, en suma, sino ayudar al difunto, iniciado en los misterios, a superar las trabas que habrá de vencer en el proceso de glorificación que le han de permitir transformarse en un espíritu de Luz.

Los antiguos egipcios nos han dejado algunas referencias que nos hablan de la creencia, propia, sin duda, solamente de los círculos de iniciados en los misterios, de que el hombre es Dios no solo en el más allá, tras superar el proceso de glorificación que antes hemos apuntado, sino también aquí, en nuestro mundo inferior. Existen, en ese sentido, algunas inscripciones que nos sugieren que los textos mágicos eran ofrecidos a círculos de iniciados que tenían oportunidad de acceder en vida a unos conocimientos sagrados de gran trascendencia. François Daumas cita a un personaje que buen conocedor de las cuestiones teológicas parece aludir en su biografía a las enseñanzas iniciáticas a las que habría tenido acceso. El individuo, un tal Paheri El Kab, que nos habla de un modo ciertamente sibilino, para no traicionar la obligación que tiene de guardar secreto, nos dejó escrito lo siguiente:

“He sido puesto en la balanza. He salido de ella examinado, intacto, salvado. Yo iba y venía, con las mismas cualidades en mi corazón. No he dicho mentiras contra nadie, pues conocía al Dios que está en el hombre, estaba perfectamente instruido y sabía distinguir esto de aquello. He cumplido con todas las cosas con arreglo a las palabras.”

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13 comentarios:

  1. ay.. pero qué bello deleite leer estas cosas amigo! has llegado a mi punto débil.. la magia del antiguo Egipto...

    Te recomiendo este excelente texto de Jorge Ángel Livraga -si no lo has leído ya-: "Continuidad de la magia iniciática en el Egipto antiguo". Lo puedes encontrar en el portal de artículos de Nueva Acrópolis.

    La transmisión de la sabiduría mediante la vía discipular garantiza que se conserve la pureza del conocimiento. Y para triunfar en la vía discipular hace falta tener fe, valor y conocimiento. Tal vez porque hemos perdido el vínculo con lo trascendente, como muy acertadamente lo señalas, no entendemos estas cosas...

    Pero mira tú que todo el saber está aguardando entre los libros que no leemos, la gente que aún no conocemos, las cosas que nos pasan y cuyo significado ignoramos...

    Claro que es más fácil si tenemos un maestro o un camino.. Pero si no, no es imposible, ya que los dioses han dispuesto toda la magia para quien ose encontrarla.. Y el contenido del Libro de los Muertos tiene vigencia en la medida en que sepamos que los tiempos cambian pero no ciertas verdades...

    Un beso amigo... Siempre es tan reconfortante pasar por aquí a ver las maravillas que nos regalas ;)

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. ay.. pero qué bello deleite leer estas cosas amigo! has llegado a mi punto débil.. la magia del antiguo Egipto...

    Te recomiendo este excelente texto de Jorge Ángel Livraga -si no lo has leído ya-: "Continuidad de la magia iniciática en el Egipto antiguo". Lo puedes encontrar en el portal de artículos de Nueva Acrópolis.

    La transmisión de la sabiduría mediante la vía discipular garantiza que se conserve la pureza del conocimiento. Y para triunfar en la vía discipular hace falta tener fe, valor y conocimiento. Tal vez porque hemos perdido el vínculo con lo trascendente, como muy acertadamente lo señalas, no entendemos estas cosas...

    Pero mira tú que todo el saber está aguardando entre los libros que no leemos, la gente que aún no conocemos, las cosas que nos pasan y cuyo significado ignoramos...

    Claro que es más fácil si tenemos un maestro o un camino.. Pero si no, no es imposible, ya que los dioses han dispuesto toda la magia para quien ose encontrarla.. Y el contenido del Libro de los Muertos tiene vigencia en la medida en que sepamos que los tiempos cambian pero no ciertas verdades...

    Un beso amigo... Siempre es tan reconfortante pasar por aquí a ver las maravillas que nos regalas ;)

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  5. Te voy a decir la verdad Antiqva, tiene un punto esta historia que me asusta.
    Seguramente porque tiendo racionalizar demasiado las cosas, me siento segura con la lógica y con lo tangible.

    Todo lo que no soy capaz de controlar me asusta; pero no puedo negar que al mismo tiempo me fascina.

    Besos

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  6. La muerte, misterio sin duda, cada civilización busca como explicarla,como afrontarla. De este lado del planeta, ya sabes, la muerte es fiestera, burlona. Para nuestros antepasados, era ofrenda,regalo, incluso honor.

    Se contagia tu pasión por la cultura egipcia, por esos libros, por ese pueblo. Siempre aprendo al venir aquí, gracias siempre.

    saludos querido Amigo!

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  7. Leyendo esto me doy cuenta de hasta qué punto las culturas se han impregnado unas de otras. El cristianismo parece deudor de la religión egipcia. Gracias por el post que me dedicaste. Un beso enorme.

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  8. En el fondo todas las creencias, del mundo entero tiene tanto en común... señal de que somos los mismos humanos las que las creamos... desilusionante en cierto modo.
    Un beso, mi querido amigo.
    Natacha.

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  9. Una delicia aprender contigo.

    Un abrazo.

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  10. me inquieta, me emociona, me atraviesa y me da escalofríos este texto y conocer más acerca de los egipcios y la muerte.
    Coincide con que mañana estoy invitada a un ritual muy especial junto a la tumba del hijo de queridos amigos, que estaría cumpliendo 18 años y falleció trágicamente hace 5 meses.
    Aquí los cristianos, no acostumbramos a estos rituales y estoy llena de incertidumbres al respecto.
    Si pudiera consultar con los antiguos y sabios egipcios, quizás me tranquilizaría.

    besos emocionados, amigo
    Gracias!!!

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  11. Se han hecho muchas películas sobre este tema que tanto angustiaba a los antiguos egipcios.No sé si quedarán reminiscencias de aquel pasado.Entonces,vivían preparando su muerte.El deseo innato de estar impolutos al final de su vida,de cruzar con éxito la travesía en la barca celeste, era algo con lo que crecían.El hecho de salir airosos de las duras pruebas a las que serían expuestos antes de unirse al Dios y tras superar el sub mundo, eran primordiales para poder descansar en paz...
    Leer los rituales que se llevaban a cabo es fascinante.Los cantos,plegarias, ofrendas en lugares distintos...la magia que los rodeaba y lo trascendental de cada paso dado, confieren a esta cultura un aura especial...
    Más, sabiendo que ellos creían que todo lo que hacían, era para cambiar de estado.No era morir, sino reencarnarse...el cuerpo moría,pero el alma transmutaba...
    Se ha dicho que cada faraón o noble, o cualquiera de rango, tenía su libro de los muertos consigo en su tumba...
    Bueno, me voy a ir yendo, que me paso no tres,sino cien pueblos...
    Besos,Antiqva.

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  12. Para comentar esta entrada Inuit tiene que estar en otra nota musical que hace días que se cogió el hatillo y la abandonó a su melancolía.
    Con lo que me gustan estos temas.
    Un beso.

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  13. Es el gran misterio y el gran dolor del hombre, la muerte..., y la palabra creo que es el gran don.

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Gracias, siempre, por tus palabras...