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sábado, 19 de abril de 2008

EMPEÑOS



El hombre se empecinaba en participar en los sueños de los poetas.
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6 comentarios:

  1. Doña Primavera
    viste que es primor,
    viste en limonero
    y en naranjo en flor.

    Lleva por sandalias
    unas anchas hojas,
    y por caravanas
    unas fucsias rojas.

    Salid a encontrarla
    por esos caminos.
    ¡Va loca de soles
    y loca de trinos!

    Doña Primavera
    de aliento fecundo,
    se ríe de todas
    las penas del mundo...

    No cree al que le hable
    de las vidas ruines.
    ¿Cómo va a toparlas
    entre los jazmines?

    ¿Cómo va a encontralas
    junto de las fuentes
    de espejos dorados
    y cantos ardientes?

    De la tierra enferma
    en las pardas grietas,
    enciende rosales
    de rojas piruetas.

    Pone sus encajes,
    prende sus verduras,
    en la piedra triste
    de las sepulturas...

    Doña Primavera
    de manos gloriosas,
    haz que por la vida
    derramemos rosas:

    Rosas de alegría,
    rosas de perdón,
    rosas de cariño,
    y de exultación.

    Gabriela Mistral

    Un abrazo, amigo

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  2. Preciosa esa imagen...

    Y el cuento, claro...

    Saludos

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  3. Antiqva, qué preciosidad, qué buen contrapunto a la entrada anterior. Qué texto, bellísimo, ¿y de dónde salen esas flores tan preciosas?

    Soñar es hermoso y si otros sueñan para nosotros..., mejor intentar soñar por uno mismo y a la vez participar de los sueños de los otros..., y es lo que hacemos, no? también soñamos los sueños de los otros, por lo menos un poquito.
    Un abrazo.

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  4. Si
    aunque cuando la musa sale a almorzar
    me toca pensar
    los dulces cantos
    suenan baldíos
    los dulces sueños
    en chuchurríos
    y cuando se junta la paja y el grano
    que tan fácil había salido
    vuelve al principio
    de labrar de nuevo
    ante la página en blanco
    demasiada carrerilla estampa
    demasiada poca adormece
    Vuelvoo mis días de fortunios
    en infortunios, con la misma facilidad con que le doy la vuelta.
    Yo los míos son de infortunios
    en estos días troníos
    en los amanecers nublados
    de tiempos destemplados.

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  5. Porque los poetas tienen sueños voladores, de alas inmensas que los hace subir y subir, o bajar y bajar...
    Recorren el mundo con sus sueños alados y van recogiendo flores hermosas que dejan caer grácilmente sobre los paisajes verdes o los humanos, donde el órgano rojo las recoge, las huele, las posa en ese jarrón interno que decora nuestro interior...
    Un beso.

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  6. Acabo de llegar a tu blog a través de Planeta Fernando y veo que compartimos la afcción por el antigüo Egipto, esa magica cultura, así que nos leemos pronto. Saludos

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Gracias, siempre, por tus palabras...