Páginas

domingo, 3 de agosto de 2008

MUJERES DEL RENACIMIENTO





En la actualidad, los expertos en el medievo afirman unánimemente que el tremendo incremento demográfico correspondiente a este periodo, se debió, sin duda, al renacimiento del amor. Por mi parte, si no es demasiado tarde, quiero expresar mi agradecimiento a las mujeres renacentistas, por el entusiástico celo con que se entregaron al movimiento. Mujeres como aquéllas, no se encuentran ya.

Indiscutiblemente, el amor fue el elemento determinante del aumento de la población. Pero, aun el amor, con lo poderoso que es, precisa de la cooperación del sexo fuerte, y, en aquella época el sexo fuerte se hallaba activamente ocupado en la apertura de nuevas rutas comerciales. ¿Qué hay que pensar, entonces? ¿Existe solución para este enigma? El misterio subsistió durante centurias, hasta que hace un año, el doctor Max Krum, autor de “El amor y las rutas comerciales”, aventuró una hipótesis que fue aceptada y abucheada con igual entusiasmo. Sugería en ella la posibilidad de que, aprovechando la ausencia de los maridos, comprometidos en la búsqueda de las rutas comerciales, descendieran sobre las ciudades grupos nómadas de godos. Es probable que los godos, cantando acompañados del rasgueo de sus guitarras a lo largo de las vías urbanas, no tardaran en atraer la atención de las chicas renacentistas, con las consecuencias previsibles en ausencia de los varones medievales…

Groucho Marx (Memorias de un amante sarnoso).


.

8 comentarios:

  1. Genial Antiqva. Bravo por los godos más listos que los maridos.Es que donde este el verbo y el canto....lo puede todo, o casi.
    Inuits

    ResponderEliminar
  2. Jajaja.... Gran parte de la población procedemos entonces de los godos... Qué bueno.. jajaja.
    Un besito.
    Natacha.

    ResponderEliminar
  3. Ayyyyy que machismo, me alegra saber que no es tu manera de pensar jajajaja

    Eso del sexo fuerte, de procrear como conejas y que cada uno te coja cuando le venga en gana hayyyyyyyyyyy que no que no, que me pone mala pensarlo jajajaja

    Con lo de los godos pues si ellas querían pues bien jejeje ¿pero querían?

    Besos guapo.

    ResponderEliminar
  4. Según iba leyendo no sabía si enfadarme o reírme, menos mal que leí la firma y así me reí a gusto.

    ResponderEliminar
  5. ¡Un amante sarnoso!!! santas porquerías batman! jajaja
    pero quien sabe, nunca podremos estar 100% seguros de nuestros antepasados :$

    ResponderEliminar
  6. Ahora entiendo esa fijación de los españolitos por las suecas.

    Me alegra saber que nosotras fuimos las primeras, ya que el lugar de origen de los godos fue al sur de la actual Suecia.

    Mi padre tenia los ojos marrones, y yo claros ¿Será eso una señal?

    Besos (no se como se dicen en sueco)

    ResponderEliminar
  7. Pues a mí, me parece muy factible que así fuera...a ver las pobres mujeres abandonadas y los godos por ahí dándole a la música...jejeje
    Muy bueno, Antiqva.
    Besos.

    ResponderEliminar
  8. Bueno, pues cuando el profesor Max Krum, tenga y ponga la misma diligencia en la investigación de la vida privada de los maridos de las mujeres renacentistas, por esas rutas comerciales y escriba un libro sobre ello... me pensaré si me leo este.
    Mientras tanto, me reservo mi opinión sobre el susodicho profesor y su estudio.
    Imagino y espero que lo hayas publicado como curiosidad.
    Abrazos Antiqva.

    ResponderEliminar

Gracias, siempre, por tus palabras...