Apertura f/18
Tiempo de exposición 1/100 s
Velocidad ISO – 200
Distancia focal 70 mm
Compensación de la exposición -0,70
HDR
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Cuando viajo por
Castilla suelo releer los poemas de Antonio Machado, que tanto amó sus campos,
ya que aunque vivo en Andalucía desde hace mucho tiempo y mucho en mi es
andaluz lo cierto es que nunca he dejado de sentirme “castellano” y me encanta
recorrer, una y otra vez, las ciudades, los pueblos y los campos de mi
Castilla, esos mismos espacios que Machado cantó en sus poemas.
Estos días pasados,
con unos amigos de Valladolid, hicimos una excursión por las tierras de la
Ribera del Duero en la que terminamos
arribando entre muchos otros pueblecitos y rincones a Peñafiel, ya casi
en el límite entre Valladolid y Burgos. Hice allí la fotografía que ilustra este
texto, intentando aunar en ella la silueta del impresionante castillo roquero y
la estampa viva de su tradicional caserío. La imagen la hice desde la plaza del
Coso.
En sus “Campos de
Castilla”, Machado incluyó un poema que desde siempre me ha impresionado. Lo
dedicó el poeta al maestro “Azorin”, que por esos tiempos había publicado su
libro “Castilla”.
Es un poema
intenso, que refleja a mi modo de ver mucho del alma de mi vieja Castilla. Todo
sugiere en él que el poeta está recreando una experiencia biográfica, que habría
que incluir posiblemente en la excursión que cuando vivía en Soria realizó a la
Laguna Negra, ya que la venta de Cidones estaba situaba precisamente en el
camino de Soria a Burgos, antes de
llegar a las “tierras de Alvargonzález”, cuyo cuento/leyenda reflejó el autor
en su obra.
“La venta de
Cidones está en la carretera
que va de Soria a
Burgos. Leonarda, la ventera,
que llaman la
Ruipérez, es una viejecita
que aviva el fuego
donde borbolla la marmita.
Ruipérez, el
ventero, un viejo diminuto
-bajo las cejas
grises, dos ojos de hombre astuto-,
contempla
silencioso la lumbre del hogar.
Se oye la marmita
al fuego borbollar.
Sentado ante una
mesa de pino, un caballero
escribe. Cuando
moja la pluma en el tintero,
dos ojos tristes
lucen en un semblante enjuto.
El caballero es
joven, vestido va de luto.
El viento frío
azota los chopos del camino.
Se ve pasar de
polvo un blanco remolino.
La tarde se va
haciendo sombría. El enlutado,
la mano en la
mejilla, medita ensimismado.
Cuando el correo
llegue, que el caballero aguarda,
la tarde habrá
caído sobre la tierra parda
de Soria. Todavía
los grises serrijones,
con ruina de
encinares y mellas de aluviones,
las lomas azuladas,
las agrias barranqueras,
picotas y colinas,
ribazos y laderas
del páramo sombrío
por donde cruza el Duero,
darán al sol de
ocaso su resplandor de acero.
La venta se oscurece.
El rojo lar humea.
La mecha de un
mohoso candil arde y chispea.
El enlutado tiene
clavados en el fuego
los ojos largo rato;
se los enjuga luego
con un pañuelo
blanco. ¿Por qué le hará llorar
el son de la
marmita, el ascua del hogar?
Cerró la noche.
Lejos se escucha el traqueteo
y el galopar de un
coche que avanza. Es el correo.”
Han pasado muchos
años desde que Machado escribió sus “Campos de Castilla”. Todavía, sin embargo,
uno, cuando los relee, siente que la emoción le llega con la misma fuerza de la
vez primera. Uno quiere ver en ese caballero joven, enlutado, al propio poeta,
que ha perdido en Soria a la jovencísima Leonor. No se si cuando Machado
escribió este poema había ya muerto o no su niña amada. Tampoco es algo que
revista ya alguna importancia, a fin de cuentas nunca sabremos si son mas
importantes las cosas vividas o las solamente soñadas, y para mí, cuando releo
el poema, lo que me llega al corazón es que en estos versos Machado “se estaba
soñando” a si mismo.
Creo que has definido perfectamente ese estadio en el que parecía vagar el escritor poeta por aquel entonces,cuando sus poemas castellanos parecían un continuo peregrinar por sus vivencias.
ResponderEliminarO eso nos parece al leerlos.
La foto es impresionante,pero no menos que la de la cabecera donde parece que ese grupo de niños,junto a esas dos mujeres, aparecen iluminados por halos de luz.
Precioso todo.
Besos.
Es comprensible tu emoción, tanto por la belleza de los versos del admirado maestro Machado, como por el hecho de ser tú mismo castellano, la tierra tira mucho... Preciosa entrada y la foto verdaderamente espectacular. Tú también te estás conviertiendo en un verdadero maestro de la fotografía. Besos.
ResponderEliminarPreciosas letras y bella imagen nos reglas amigo ANTIQVA, nada menos que de el maestro Machado.
ResponderEliminarCastellano tú, siempre hubiera asegurado que eras andaluz.
Un abrazo
Ambar
Una entrada Impresionante y Emotiva, una foto que nos lleva directamente a esa Castilla que todos admiramos y que el gran Machado amo. Enhorabuena y abrazos desde Sevilla
ResponderEliminar¿Qué decirte de tu foto?
ResponderEliminarPaisajes muy diferentes, pero no por ello menos bellos e imagino que con el corazón partido, entre tu Castilla y Andalucía. (El mío en mil pedacitos, me gustan todos los rincones de nuestra geografía)
Hace unos años pasé unos dias en Salamanca y desde muchos ya, tengo una visita pendiente a Valladolid, donde según cuentan, se habla el mejor castellano del mundo ;)
Las soñadas, amic, sin duda!
Aferradeta ben forta!
Así que castellano... pues yo cazurra, jeje
ResponderEliminarMe gusta mucho la foto, creo que sí, que transmite el espíritu y la esencia castellanos. Pobre Machado, toda la vida perdiendo.
Un abrazo
menuda imagen nos ha regalado !!
ResponderEliminarsi me encanta ese castillo tan recortadito, como los de mi niñez, mas me dejan embobada esos ricos balcones de madera
en este texto, no solamente he conocido un poco mas a Machado, si no que tambien a ti
...y cada vez me gustais mas
jajajajjajajja
un beso enorme, amigo mio
I love these possibilities to travel with you - and I am so imposed over your beautiful country.
ResponderEliminarQuerido amigo hermosa estampa.De estar aun viva su amada mujer esto era un presagio,la emoción sale de adentro y perdura en toda su belleza y dolor.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Ancha es la vieja Castilla...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
IMPRESIONANTE ENTRADA, completa por tus letras, por las letras de Machado y por la bellísima fotografía que tiene el poder de trasladarme a Peñafiel. Bellísimo. No sabia o no recordaba que eras castellano, pensé que eras andaluz...
ResponderEliminarBesitos.
Es precioso, Antiqva, todo.
ResponderEliminar¿Qué tendrá la poesía que siempre emociona?, quizás es eso, que es poesía.
El cielo de aquí abajo, la vista, también me encantó.
Abrazo
Querido amigo,estoy impresionada, he estado enla foto de tu portada y digo que he estado pues parece que me ha permitido entrar en ella y con los chicos y las chavalas, pasear por la Mezquita..
ResponderEliminarha sido mágico querido amigo, me conoces y sabes que no sé mentir, esa foto, permite al que la mira, adentrarse en ella y disfrutar de mil misterios, la quiero para mi, sabes que me la llevaré.....
y en cuanto a Castilla, amigo es mi corazón, es mi corazón mas profundo amo a Machado y amo Castilla paseo por ella como un dama, como una campesina, como una hechicera, de cualquier forma y manera Castilla siempre siempre deja ser.. al que por ella viaja.
Gracias por este homenaje a nuestra tierra.
y gracias por esa foto..
Un beso de luz y magia
Es lo que tiene la buena poesía, puedes leerla siempre a través del tiempo, y Machado es uno de los grandes.
ResponderEliminarEs magnífica la fotografía.
Un abrazo.
La foto es preciosa, amigo. Castilla es impresionante. De Peñafiel es una tía mía, ¡qué casualidad! Una vez estuve allí pero hace tanto tiempo que ya no me acuerdo.
ResponderEliminarEl poema de Machado también me ha gustado volver a leerlo porque hacía muuuuucho que no lo hacía. Y es que a una no le da tiempo a tanto.
Un abrazo
me pegué a machado allá, por mis 16. y no me lo despegué jamás. releerlo me produce, tal como a vos, el impacto de la primera vez, me conmueve hasta llorar. será porque una mujer, muchos años antes de que yo fuera, anduvo por esos campos? o tal vez todos nos estemos soñando...
ResponderEliminarabrazo, amigo.*
ah! maravilla de foto, impactante como los versos de machado.
Cuanta belleza en Castilla, cuantos recuerdos en mi corazón.
ResponderEliminarExcelente post.
Un abrazo
Magnífico texto ilustrado por una espectacular imagen. Un trabajo soberbio por el que te felicito. Saludos, manolo.
ResponderEliminarExcelente eso de "soñarse a sí mismo" ... ;)
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